8 usos de la piña (ananás)
Si te gusta la piña estás de enhorabuena. Esta fruta tropical, además de deliciosa y apetecible en cualquier época del año, es tremendamente beneficiosa para nuestro organismo, no sólo por su composición nutricional, sino también por sus propiedades. Vamos a conocer qué características de la piña la convierten en un alimento tan especial. ¡Posiblemente te animarás a incrementar su consumo!
- La piña aporta vitaminas C, A, E y de todo el complejo B. Hay que resaltar que 150 g de piña proporciona 80 mg de vitamina C, el 100% de la dosis diaria recomendada. La vitamina C es un potente antioxidante que combate los radicales libres y del envejecimiento prematuro y refuerza el sistema inmune.
- También posee un alto contenido en minerales: Hierro, Zinc, Magnesio, Manganeso, Calcio, Potasio y Yodo. El Magnesio precisamente potencia la potencia la acción de la vitamina C y ayuda a que el organismo la asimile mejor.
- Es un alimento muy adecuado en dietas de control de peso por su bajo contenido en calorías, aproximadamente 55 por cada 100 g. La mayor parte de su composición es agua y fructooligosacáridos, un tipo de fibra insoluble que el organismo no puede asimilar ni digerir. Esta fibra aporta sensación de saciedad, disminuyendo el apetito y evitando que se produzcan excesos en las comidas o se pique entre horas. También mejora el tránsito intestinal a la vez que reduce el exceso de gases al equilibrar la flora intestinal.
- Es una fruta con propiedades diuréticas y depurativas por su alto nivel de Potasio. Favorece la eliminación de líquidos y de toxinas del organismo, ayudando a la eliminación de edemas y retención de líquidos en zonas localizadas.
- La piña es un alimento que favorece la digestión gracias a su contenido en una enzima llamada bromelin Esta enzima se concentra en el tronco central del fruto, en la parte más dura y fibrosa de la piña . La bromelina estimula las secreciones del páncreas y los jugos gástricos, lo que deshace las proteínas liberando los aminoácidos que las forman mejorando considerablemente el proceso de digestión. Para aprovechar al máximo este efecto se recomienda consumir antes de las comidas para estimular los jugos gástricos y preparar el estómago a la ingesta de alimentos.
- La bromelina del tronco de la piña es también un buen antiinflamatorio natural, contribuyendo a la disminución de la hinchazón. Esta propiedad antiinflamatoria también nos ayudará a luchar contra la celulitis y la grasa localizada porque puede fragmentar las proteínas y separar el tejado celulítico, ayudando a la desinfiltración, movilización y eliminación de las grasas. Esto es especialmente interesante si estamos con una dieta de control de peso.
- Contribuye a aumentar el metabolismo de las grasas.
- Ayuda a mejorar la circulación sanguínea.
Consumir piña al natural es una buena manera de aprovechar sus cualidades, evitando siempre la enlatada en almíbar por su contenido en azúcares superfluos. De todas formas el componente más valioso de la piña, la bromelina, se encuentra en el tronco central de la fruta, y la mejor manera de beneficiarnos al máximo de sus propiedades sería consumiendo directamente el extracto del tronco. En el mercado podemos encontrar preparados con la dosis idónea para un resultado óptimo, generalmente en forma de cápsulas de fácil transporte y dosificación.
Fuente: https://www.elgranero.com/