¿Cómo organizar la fruta y la verdura para que duren más tiempo?
Según los datos de la Confederación Española de Cooperativas de Consumidores y Usuarios, avalados por el Instituto Nacional de Consumo, cada familia española desecha unos 13 kilos de frutas y verduras al año, lo que representa un 26% de la comida desperdiciada del hogar.
Muchas veces tiramos frutas y verduras porque compramos de más y terminan poniéndose malas por no consumirlas, pero en otras ocasiones, se debe a una mala conservación por nuestra parte. Es importante que conozcamos que hay frutas que no deben estar juntas, así como que no todas deben guardarse en la nevera y es preferibles dejarlas en un frutero. En este artículo te damos algunos consejos para que conserves mejor tus frutas y verduras y las organices correctamente.
¿Nevera o frutero?
En principio, lo aconsejable es dejar la fruta, si la temperatura no es muy elevada, en el frutero, ya que en el frigorífico se paraliza el proceso natural de maduración. Lo recomendable es que el frutero esté en un lugar seco, fresco y ventilado. Además, no es aconsejable que la luz del sol incida directamente sobre los alimentos.
Si por el contrario has comprado frutas y verduras en un proceso avanzado de maduración y necesitas que te dure unos días, introdúcelas en el frigorífico. En ese caso, lo ideal es que lo coloques en los cajones reservados para ello, puesto que se trata de la zona más fría.
Hay alimentos como las patatas, las cebollas y los ajos que no es necesario meterlos en el frigorífico y, de hecho, conservan sus propiedades mucho mejor fuera de él. El tomate también es uno de estos productos que están mejor fuera.
Guárdalas por separado
No mezcles la fruta con la verdura, ponlas separadas. Estos dos tipos de alimentos tienen unas propiedades, características y maduración diferentes, por lo que las que maduran más tarde pueden ponerse pochas antes si las tenemos juntas.
Muchas frutas emiten a medida que maduran pequeñas cantidades de etileno, que provocan que las verduras pierdan la clorofila y se echen a perder. En esa línea, hay productos que emiten una mayor cantidad de gas y habría que almacenarlos solos, como las manzanas, peras, melones, ciruelas, aguacates, berenjenas, tomates, cebollas, la lechuga o el repollo.
Hay otras a las que el mencionado gas no afecta de ningún modo, así que se pueden almacenar junto a otras sin peligro para su conservación. Algunas de ellas son los pimientos, los cítricos y también los frutos rojos o las fresas, entre otros.
¿Has lavado las fresas?
Si eres de los que lava la fruta justo antes de comérselas, te diremos que está bien en el caso de las fresas, los frutos del bosque, los champiñones o las hierbas aromáticas (como la albahaca o la hierbabuena), ya que así aguantarán más. Pero para el resto, te aconsejamos que las laves antes de guardarlas, ya que puede tener restos de tierra o cualquier otro producto que perjudique a la hora de que los alimentos se conserven correctamente.
Esperamos que con estos trucos tus frutas aguanten más tiempo en perfecto estado para que puedas disfrutar de su sabor.
Fuente: https://www.65ymas.com/